El trabajo del lubricante es evitar que las piezas metálicas entren en contacto para que no haya fricción y desgaste dentro del motor o piezas en movimiento.
          La importancia de un buen aceite de motor
El lubricante juega un papel fundamental en la vida del motor. Forma una película sobre las superficies de metal separándolas para reducir la fricción y el desgaste. También actúa como un amortiguador, sirve como refrigerante para piezas del motor importantes y ayuda a reducir el consumo de combustible, ya que una buena lubricación significa que la fricción es menor, y por tanto, disminuye la resistencia de las piezas móviles internas.
Además, es de gran ayuda para prevenir la oxidación y la corrosión en el interior del motor, manteniendo las superficies limpias, disolviendo la suciedad de los depósitos y los posibles deshechos que suelte el filtro de aceite. Es por este motivo por el que debemos cambiar el aceite cada cierta cantidad de kilómetros, según las recomendaciones del fabricante.
Si se produjera una fuga en el motor o la cantidad de aceite fuera insuficiente, podría darse un sobrecalentamiento que podría llegar incluso a fundir el bloque haciendo que nuestro motor quedara inservible, sin otro destino que la chatarrización.
En ROMAN Multicentro trabajamos con las siguientes marcas:
				